Por: Miguel Angel Trujillo

Barranquilla se vistió de amarillo, azul y rojo, pero la alegría quedó a medias. Colombia empató sin goles ante Perú, complicando su camino al Mundial 2026.

El Metropolitano vibró con el fervor de la hinchada, pero el gol esquivo mantuvo la tensión hasta el pitazo final. Con este empate a cero, la selección colombiana suma 21 puntos, quedando en la sexta posición de las Eliminatorias Sudamericanas.

El partido, correspondiente a la fecha 15 de las Eliminatorias, se disputó bajo un calor sofocante en Barranquilla. La selección colombiana, a pesar del dominio territorial, no logró concretar las oportunidades de gol generadas. El planteamiento defensivo de Perú, efectivo en su estrategia, neutralizó los ataques locales. La afición, fiel a su cita con la 'tricolor', alentó incansablemente, pero la falta de contundencia ofensiva fue evidente.

El técnico Néstor Lorenzo, tras el partido, destacó el esfuerzo de sus jugadores, pero reconoció la necesidad de mejorar la efectividad de cara al arco rival. No se escucharon declaraciones polémicas, el DT se mantuvo en la línea de la mesura y el análisis objetivo del encuentro. El ambiente en el camerino, según se filtró, fue de decepción controlada, conscientes de la importancia de los próximos encuentros.

El desarrollo del juego se caracterizó por un férreo marcaje en el mediocampo y pocas llegadas claras a los arcos. Las imprecisiones en los pases y la falta de definición fueron claves para que el marcador no se moviera del 0-0. El empate deja a Colombia en una situación comprometida, con seis fechas aún por disputar y la necesidad de sumar puntos en los juegos restantes para asegurar un lugar en el Mundial.

El empate complica las aspiraciones mundialistas de Colombia, dependiendo ahora de resultados favorables en las próximas jornadas. La presión aumenta sobre la 'tricolor', obligada a conseguir victorias en la recta final de las eliminatorias para asegurar su participación en el Mundial de Estados Unidos, México y Canadá en 2026. El camino se hace cuesta arriba, pero la fe de la afición colombiana permanece intacta.